Por el Prof. Jbismarck
Año 1825: En la Banda Oriental (En poder del Imperio del Brasil), se busca la unidad con las provincias unidas y rechazar a los brasileños. Entre otros argentinos, colabora con los emigrados uruguayos el futuro caudillo Juan Manuel de Rosas, quien, so pretexto de revisar campos allende el río Uruguay, contribuye a los preparativos de una invasión a la provincia usurpada. La expedición de los 33 Orientales, desembarcados en la Agraciada en 1825, provoca el levantamiento unánime de la población; Lavalleja y Oribe los jefes patriotas orientales organizan el congreso de la Florida. piden la reincorporación de la revolucionada provincia a la nación argentina. Para entonces, en ésta se había reunido un congreso, convocado por el General Las Heras pero copado por el grupo rivadaviano el cual como siempre quería excusar sus medidas dilatorias de toda acción exterior. Y este cuerpo no tuvo más remedio que aceptar aquella reincorporación, a riesgo de un conflicto con el Brasil, que el gobierno porteño había tratado de evitar durante años por todos los medios. Ante un insultante ultimatum del emperador, la guerra estalló, bajo la presión de la opinión pública, la que desde la batalla de Ayacucho mostrábase exaltada contra la pusilanimidad de gobernantes. Este sentimiento queda registrado en la correspondencia del Deán Funes con Bolívar, cuando le confiesa su indignación ante la obsecuencia de nuestro gobierno para con el agente inglés, quien se oponía a toda posibilidad de que la Argentina recuperase la provincia oriental y quedara dueña de arribas márgenes del Plata. Los hechos justificaron aquel optimismo. Pero al estallar el conflicto con el Imperio, las condiciones de Las Heras (gobernador de Buenos Aires) resultaron superlativas: Fue reconstruido el ejército permanente y las provincias invitadas a enviar sus contingentes militares. Conocemos por las Memorias del general Paz con qué eficiencia se llevó a cabo la movilización. No faltó un desdichado accidente, al que se sumó la maniobra unitaria para reponer a su adalid (Bernardino Rivadavia) en el gobierno. En efecto, el general Lamadrid, encargado de reclutar fuerzas en Tucumán, dio un golpe de estado y se apoderó del mando de su provincia natal. El gobernador Las Heras pidió al congreso que se lo castigara, pero la mayoría (unitaria), como si estuviese de acuerdo con Lamadrid, lo rehusó y a poco, el 6 de febrero de 1826, creó la presidencia, para la que nombró a Bernardino Rivadavia, en abierta violación de la ley fundamental del congreso, Y SIN TENER EN CUENTA LA VOLUNTAD DE LAS PROVINCIAS. La guerra civil se desencadena en medio de la guerra extranjera. Sus estragos se sienten primero en el norte y en el centro de la república. El presidente apoyó con armas y dinero a la Liga del Norte, formada por Lamadrid. Las amenazas contra los caudillos intercambiadas entre Lamadrid y Rivadavia, e interceptadas, hicieron arder al país. Pero la lucha exterior en agua y tierra era en general favorable a las armas argentinas. Brown repitió sus hazañas de la guerra emancipadora en las aguas del Plata, anulando a la fuerza marítima en la que Brasil confiaba más que en su ejército, derrotado, tras sucesivos encuentros parciales, en la decisiva batalla de Ituzaingó, el 20 de febrero de 1827. Pero el gobierno de Rivadavia no podía proporcionarle los medios de explotar la victoria.
El presidente, aislado del resto del país, necesitaba al ejercito para terminar con los federales por lo que pensaba en la paz y coincidía sin duda con su canciller García, quien siempre creyó que a la Argentina no le convenía la reincorporación de la Banda Oriental, según nos lo refiere Vicente Fidel López. Las sugestiones de Lord Ponsonby (enviado por la Cancilleria Británica) en el mismo sentido obedecían a instrucciones de su gobierno. A Inglaterra le interesaba "debilitar al Estado poseedor de la cuenca del Plata. Explotar a dos Estados débiles es más fácil que hacerlo con uno solo".
La gestión financiera del grupo rivadaviano habría de repercutir desastrosamente en el resultado de la guerra. Pese a que Buenos Aires, por no financiar ninguna causa nacional, era próspera, contrató un empréstito con el banco Baring Brothers (1822) de Londres, operación que el Deán Funes calificó como desatino, pues implicaba contraer deudas cuando se tiene dinero propio. Negociado deplorablemente, contratado por un inglés comisionado por la Argentina, la operación endeudó al país en un millón de libras, de las que se recibieron 570 mil, pero no en metálico (para lo que se contrató el empréstito> sino en letras de comerciantes ingleses de plaza. Se creó un banco emisor, manejado por extranjeros que se quedaron con la mayoría de sus acciones.
Rivadavia y García deben renunciar tras un lamentable tratado de paz en que renunciábamos a la provincia oriental y pagábamos los gastos de guerra....
Asume el Federal Manuel Dorrego como Gobernador de Buenoa Aires; una Convención Nacional se reúne Santa Fe y le confiere el manejo de las relaciones exteriores del país. Invistiéndolo de una autoridad Nacional delegada por libre consenso de las provincias. Su popularidad dentro de Buenos Aires era irrefutable al igual que su prestigio de político honesto y bienintencionado. Tiene dos grandes colaboradores: Roxas y Patrón en Hacienda: quién intenta poner fin a los desastres financieros heredados de la administración Rivadavia; y su joven Comandante de Campaña: Don Juan Manuel de Rosas quién soluciona los problemas de fronteras con el aborigen y funda Bahía Blanca. Sin duda que posteriormente en un futuro Congreso Constituyente, Dorrego se disputaría con Bustos, la primera magistratura del país. Piensa en continuar la guerra, pero aparecen obstáculos insalvables: El Banco (manejado por los ingleses) se niega a proveer fondos. (Había llegado al país Lord Ponsomby con el objeto de la Cancillería Británica de declarar la independencia de la Banda Oriental, lo que en geopolítica se llama un “estado tapón” o “un algodón entre dos cristales”, con el objeto secundario de declarar la internacionalidad del Río de la Plata). Habilita naves corsarias, soborna a un cuerpo de mercenarios alemanes, promueve un secuestro del emperador; respalda a los republicanos brasileños; todo esto al mismo tiempo que tiene que cotejar con Lord Ponsomby, (quién acostumbrado por Rivadavia se manejaba como un verdadero Virrey) Las tropas estacionadas en la banda Oriental comienzan a estar mal alimentadas y mal vestidas y cobran sus sueldos, con cada vez mayor atraso. Entonces Dorrego intenta finalmente presionar ventajosamente al Brasil sustituyendo la mediación inglesa por la colombiana, para la cual hace gestiones infructuosas ante su admirado Bolívar;. Se llega al fin a una paz con el Imperio que segrega para siempre la doliente provincia oriental (Misión Balcarce-Guido) y Dorrego lo gira a la Convención.
Artigas en el exilio exclamó “YA NO TENGO PATRIA...”
Otra de las grandes frustraciones de esta Nacion.
ResponderEliminarLuego de la victoria de Ituzaingo, se pierde la Banda Oriental, CONTRA la voluntad de los propios orientales. Nefasta como siempre la intromision de Rivadavia, como bien lo advirtio el General San Martin.
una consulta: el profesor Jbismarck es el benemérito Profesor el ilutre carlos Adamo Barbera?
ResponderEliminarPor supuesto que no, estimado Anonimo. Es el biznieto del Canciller Otto von Bismarck que se ha especializado en la historia argentina.
ResponderEliminarYa vendran las colaboraciones del Profesor Dr. Carlos Adamo Barbera con su propio nombre.
El profesor Carlos Adamo Barbera engalana cualquier reunión y conferencia. Su ausencia en este blog demuestra mediocridad y envidia. Fasulo ¿cuando vendran dichas colaboraciones?
ResponderEliminarSi el autor del blog lo considera conveniente (cosa muy probable), proximamente habra articulos del maestro Barbera, a quien todos tenemos en gran estima.
ResponderEliminarTotalmente cierto lo que dice el estimado Vicente González. En el blog no hay ningun tipo de resquemor...todo lo contrario hacia nuestro compañero el Profesor Barbera, quien prometio una de sus valiosas colaboraciones. Federal Apostólico nosotros somos federales netos y actuamos en Organizacion ya que consideramos que los esfuerzos individuales por mas brillantes que fueran, caen en la incertidumbre de la historia. Un abrazo Federal
ResponderEliminarsi capitan estamos listo
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