Por el Prof. Jbismarck
Es muy curiosa la visión actual del Che. Desde sectores ultraderechistas hablan de un furioso antiperonismo, de los sectores neoliberales de un personaje repudiable al igual que Perón y desde la izquierda como un revolucionario y ven a Perón como un viejo facho enemigo de las conquistas clasistas...EN REALIDAD EXISTIÓ UNA RELACIÓN ENTRE ELLOS. Ernesto Guevara (1928-1967) pasó por distintas etapas en su evolución política. Proviene de una familia burguesa antiperonista, con influencia de la izquierda liberal. Solo después de abandonar el país comprenderá que Perón conducía una lucha contra la oligarquía y el imperialismo y que en el campo social promulgara leyes de protección de los trabajadores. Durante los últimos años de su carrera de medicina Ernesto realiza varios viajes por la Argentina y su primer viaje por América latina con Alberto Granado. También durante algunos meses trabajó de enfermero de YPF, en la marina mercante argentina, recorriendo los puertos más importantes de América latina. Uno año después del segundo gobierno del General Perón en 1953, con el título de médico bajo el abrazo, decide realizar junto a su entrañable amigo Carlos “Calica” Ferrer, su segundo y definitivo viaje que lo convertiría en el Che. En carta a su madre del 20 de junio de 1955 (cuatro días después del salvaje bombardeo a la Plaza de Mayo que había dejado medio millar de muertos), Guevara se adelanta a los tiempos, califica a esos: “mierdas de los aviadores que después de asesinar gente a mansalva se van a Montevideo a decir que cumplieron con su fe en Dios” luego continua con estas palabras “matarán a cientos de “negros” por delito de defender sus conquistas sociales” También le dirá: "La caída de Perón me amargó profundamente, no por él sino por lo que significa para toda América (…) Estarás muy contenta, podrás hablar en todos lados con la impunidad que te da el pertenecer a la clase en el poder".
John William Cooke, "el gordo", líder de la izquierda peronista, exiliado en Cuba, había convencido al Che de que ningún proyecto revolucionario era viable en Argentina sin el apoyo del general Perón, quien contaba con la idolatría de los sectores populares. Guevara tuvo dos encuentros con Perón, ambos en puerta de Hierro, el primero en 1964 y el otro en 1966, antes de la experiencia boliviana. Enrique Pavón Pereyra dice que al recibirlo la situación de asilado del General no era muy cómoda, (era vigilado por Franco) así que evitaba recibir abiertamente a políticos de izquierda porque después venían las protestas y las amenazas de expulsión. Así sucedió, por ejemplo, cuando recibió al chileno Allende, entonces senador por el socialismo. Durante la entrevista le contó a Perón su plan de insurgencia en el Alto Perú. Perón se mostró sorprendido y al principio no le creyó, o se hizo el que no le creía. 'Esto va en serio' dijo el Che, y dio los detalles de la operación. El general le dijo "Yo conozco bien la zona porque allí cursé el segundo año de la instrucción militar que hicimos en Brasil, en Bolivia y en Chile", le dirá y luego pronosticará con dramatismo: "Disculpe, Comandante, que sea franco con usted, pero usted en Bolivia no va a sobrevivir. Es contra natura. Suspenda ese plan. Busque otras variantes". Luego de algunos segundos de silencio agregó, grave: "No se suicide". Perón le dijo que no estaba en condiciones de darle una ayuda formal del Movimiento Justicialista mientras las acciones se desarrollaran en territorio boliviano, pues las circunstancias no favorecían que comprometiese en una operación internacional a un partido debilitado como el suyo que debía enfrentar la proscripción a que lo habían condenado las dictaduras militares de la Argentina. Cuando la acción del Che se trasladase a territorio argentino, entonces podría contar con el peronismo. Mientras, prometió, no se opondría a quienes por voluntad propia quisieran participar del foco boliviano". Pavón Pereyra: "Perón me mostró una foto dedicada de Cooke vestido de guerrillero cubano, seguramente se la habría entregado el Che, y me comentó: 'Este hombre ha dejado de ser peronista'". Perón y el Che disentían en la metodología y la estrategia: Perón era esencialmente un político dotado y había incorporado a su proyecto a la mayoría de los sectores del trabajo argentinos en una amplia alianza policlasista con el objetivo de alcanzar sin mayor violencia la meta de una patria económicamente autónoma y políticamente independiente. El Che, en cambio, proponía una revolución socialista tan violenta como su enemigo a partir de su teoría del foco, es decir la instalación de estallidos insurreccionales limitados que promoverían una reacción en cadena que multiplicaría su poder de acción sin necesidad de trabajo de base previo. "Crear dos, tres… muchos Vietnam es la consigna". Enterado del asesinato del Che en La Higuera, Perón escribió desde la Quinta de Puerta de Hierro, en su exilio en Madrid: "Compañeros: Con profundo dolor he recibido la noticia de una irreparable pérdida para la causa de los pueblos que luchan por su liberación. (…) Hoy ha caído en esa lucha, como un héroe, la figura joven más extraordinaria que ha dado la revolución en Latinoamérica: ha muerto el comandante Ernesto 'Che' Guevara. Su muerte me desgarra el alma porque era uno de los nuestros, quizás el mejor: un ejemplo de conducta, desprendimiento, espíritu de sacrificio, renunciamiento. La profunda convicción en la justicia de la causa que abrazó le dio la fuerza, el valor, el coraje que hoy lo eleva a la categoría de héroe y mártir. He leído algunos cables que pretenden presentarlo como enemigo del peronismo. Nada más absurdo. Suponiendo fuera cierto que en 1951 haya estado ligado a un intento golpista, ¿qué edad tenía entonces? Yo mismo, siendo un joven oficial, participé del golpe que derrocó al gobierno popular de Hipólito Irigoyen. Yo también en ese momento fui utilizado por la oligarquía."
Sin embargo Perón deslizó algunas críticas sobre la estrategia guevarista. Así lo planteó a Ricardo Rojo, en respuesta al envío del libro Mi amigo el Che: "Sin cuanto usted nos informa de su paso por el Congo y muchas otras circunstancias, no sería fácil comprender que un hombre ya fogueado y experimentado en la guerra de guerrilla se haya encontrado en Bolivia en una situación tan precaria de medios y preparación. La 'guerra de guerrillas', al contrario de lo que algunos creen, es más vieja que mear en los portones, pues se practicaba en gran escala ya en la época de Darío II. Desde entonces, hasta la II Guerra Mundial de 1938-1945, no ha dejado de ser en algunos sectores y circunstancias, la forma de luchar". "Pero, como forma atípica de guerra, tiene sus exigencias originales, según sean las condiciones que la situación presenta. La empresa de Ernesto Guevara era, a la vez que temeraria, casi suicida". "El Che tuvo que desarrollar sus tremendas operaciones, sin más medios que su extraordinario valor personal y la firme decisión de vencer que le animaba como hombre de una causa. Sin embargo, cuando se opera contra fuerzas regulares especialmente preparadas para esa clase de lucha, tales virtudes no son suficientes; es preciso, por lo menos, contar con algo seguro en cuanto a fuerzas y medios de subsistir en medio tan inhóspito". "Personalmente creo que es un individuo brillante pero del lado equivocado. Tiene una conversación muy interesante y una obsesión por el comunismo muy marcada. Pretende reunir fuerzas no sé de dónde para 'liberar' nuestros pueblos americanos. Advertí en seguida que tiene clara su meta y es capaz de cualquier cosa. Este muchacho va a terminar muy mal según creo. Ya ve usted que hay de todo bajo las viñas del Señor".
No hay comentarios:
Publicar un comentario